El comunitzarismo
El comunitzarismo
Este neologismo parecerá excesivo y no mitiga la dificultad en la que estamos de tener que renunciar para significar su pertenencia a “la comunión”- término limitado a la relación con Dios - en beneficio de “comunitarismo” que su desinencia anexionará espontáneamente a todos los autoritarismos.
La prueba es que las comunidades de psicoanalistas rara vez dejarán de debatir o debatirse con quien o con aquello que es autoridad para ellas: asunto de significante, pues.
Sin embargo, es patente que lo que los reúne y se supone hacerlos reunirse es el Real, el cual en su momento no tiene otro nombre que el de su propio grupo. Es la única manera de hacer oír la nada que los comunitariza, incluso si fuera necesario al menos uno de ellos, o si no, cada uno para fundamentar su decir y que le sea reconocida la autoridad.
De lo contario el flagelo, de la balanza por supuesto, oscila entre los dichos de las diversas variedades de neurosis o del dogmatismo impuesto por el carisma de Fulano o Fulana.
Cuán débiles somos, Señor, por no poder prescindir de ti y de hacerte renacer.
Traducción al español: Iris Sánchez